El Jardín de la Amistad

 

En un pequeño pueblo en las montañas del Ecuador, había dos amigos, Kuri y Tari. 
 
Vivían en armonía, compartiendo sus juguetes y secretos. Sin embargo, un día, Tari accidentalmente rompió el juguete favorito de Kuri. 
 
Kuri se enfadó y juró no hablarle nunca más a Tari. Pero, con el tiempo, se dio cuenta de que la amistad era más valiosa que cualquier juguete. 
 
Un día, mientras Kuri estaba solo en el bosque, encontró una pequeña plántula de flores. La cuidó y la hizo crecer, y pronto se convirtió en un hermoso jardín. 
 
Tari, arrepentido, se acercó a Kuri y le pidió disculpas por romper su juguete. Kuri, viendo el arrepentimiento en sus ojos, lo perdonó. 
 
Juntos, decidieron plantar una flor por cada día que no se hablaron. Pronto, el jardín estuvo lleno de flores coloridas, simbolizando la renovación de su amistad. 
 
Un día, un anciano del pueblo les dijo: "La venganza es como una maleza que ahoga las flores. Pero el perdón es como el agua que las hace crecer." 
 
Kuri y Tari comprendieron que la amistad era más fuerte que cualquier desacuerdo y que el perdón era la clave para mantenerla viva. 
 
Mensaje reflexivo: La venganza puede parecer una solución fácil, pero solo nos lleva a más dolor y separación. El perdón y la amistad nos permiten crecer y florecer juntos.

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